A raíz de modificaciones en el paradigma laboral y el incremento del trabajo remoto, los espacios que albergan a los empleados deben también reconvertirse.
Los tiempos modernos traen consigo una serie de modificaciones encadenadas, que hacen repensar todo lo que se estaba haciendo hasta ese momento y adaptarlo de alguna manera a lo que se viene. Un ejemplo de eso, es lo que pasa con el cambio en el diseño de oficinas que estamos observando desde el mercado inmobiliario, dado que es creciente la tendencia de trabajadores remotos que se observa.
A medida que un mayor número de empresas permite el valor de permitir que sus empleados no tengan que estar todo el día en el lugar de trabajo y que puedan hacerlo desde sus hogares por ejemplo, más importancia toma la generación de espacios en donde se sientan cómodos no solo los que van todos los días, sino también aquellos que lo hacen algunos días en la semana, o hasta en el mes. Este desafío, es el que hace pensar el cambio en el diseño de oficinas, como un reto importante para quienes no solo abren nuevos recintos, sino también para aquellos que ya cuentan con los mismos y deben adaptarlos para no perder competitividad en el mercado inmobiliario.
Tal vez te interese: Mercado de Oficinas Caba y GBA
Con estas nuevas tendencias se produce un beneficio win-win entre empleados y empleadores. Los primeros, pueden trabajar desde la comodidad de su casa haciendo home-office, e ir combinando ese tiempo con el que pasan en la oficina. Los segundos, ahorran costos estructurales por no tener todos los días de la semana a sus colaboradores (no solo con la utilización del espacio se ahorra, sino también con el consumo de café, por ejemplo, de alimentos, y hasta de energía). A esta ecuación, le falta la suma por parte de los dueños o administradores de inmuebles, que deben tomar como una obligación prestar atención a esta moda que llegó para quedarse y sin dudas, hacer en el cambio en el diseño de oficinas suficiente, que les permita seguir a la vanguardia.
