El 2023 ha llegado con emocionantes transformaciones que revolucionan a la industria automotriz en muchos sentidos. La adopción masiva de los autos eléctricos y los grandes avances en la conducción autónoma son algunos de los cambios que se esperan para este año. En este artículo exploramos estas tendencias y cómo están cambiando la forma en que utilizamos los automóviles.
Tendencias actuales en la industria automotriz
Vehículos eléctricos y su impacto en el mercado
Los vehículos eléctricos han experimentado un crecimiento notable en los últimos años, generando un impacto significativo en el mercado automotriz.
La creciente preocupación por el cuidado del medio ambiente y la necesidad de reducir las emisiones de carbono hacen que cada vez más consumidores elijan los autos eléctricos.
Uno de los grandes avances que está teniendo lugar este año es la mejora de las baterías, que ofrecen una mayor autonomía y una carga más rápida, traduciéndose en la posibilidad de recorrer distancias más largas.
Además del impacto ambiental positivo, los vehículos eléctricos también ofrecen beneficios económicos. La tendencia hacia el uso de estos autos se ve influenciada por los precios, que cada vez se asimilan más a los de vehículos tradicionales. Además, los costos de mantenimiento son más bajos debido a que no utilizan combustible.
En definitiva, comprar un auto eléctrico no solo es una decisión amigable con el medio ambiente sino que también resulta económicamente más conveniente.
Las grandes compañías también están más comprometidas con la reducción de emisiones de carbono y están invirtiendo sumas considerables de dinero en la producción de vehículos eléctricos.
Tesla sigue siendo el mayor vendedor de estos vehículos a nivel mundial. En el 2022 se vendieron 1,3 millones de unidades del SUV Model Y (modelo deportivo) y se prevé un aumento del 37% para este año. Volkswagen y el grupo Stellantis (con marcas como Peugeot, Citroën y Jeep) también buscan posicionarse dentro del mercado.
En el sector más lujoso, Rolls-Royce y Ferrari prevén lanzar sus primeros modelos de cero emisiones en un futuro cercano.
La Agencia Internacional de Energía (AIE), ha informado que la venta de vehículos eléctricos este año presenta un crecimiento sostenido.
En Estados Unidos, si bien el mercado se encuentra más rezagado, se prevé un incremento de ventas para el 2023.
En China la venta de autos eléctricos se duplicó en 2022, pero podría perder ritmo en 2023, en línea con la evolución de la actividad económica china.
En cuanto a la Unión Europea, durante el 2022 el segmento de vehículos eléctricos se mantuvo firme. Para 2023 la consultora LMC Automotive proyecta que las ventas de estos autos superen ampliamente al mercado tradicional.
Latinoamérica históricamente ha sido una de las regiones con menor presencia de autos eléctricos, pero la comercialización creció durante el 2022. En Argentina, el número de autos eléctricos que circulan representa un 0,06 % y empiezan a verse puestos de carga en algunas estaciones de servicio y estacionamientos de centros comerciales.
Tecnología de conducción autónoma y su evolución
Otro de los cambios revolucionarios que estamos viviendo son los grandes progresos en la tecnología de conducción autónoma. Los avances en sensores, inteligencia artificial y procesamiento de datos, han permitido el desarrollo de vehículos capaces de manejarse de forma autónoma, sin intervención humana.
La conducción autónoma surgió en primer lugar por el deseo de aumentar la seguridad al volante. Lo que empezó con el sistema de frenada ABS hace cuarenta años, evitando que los frenos se bloqueen al frenar bruscamente, ahora está escalando hasta el punto de no tener ni siquiera un conductor en el auto.
En sus etapas iniciales, los sistemas de conducción autónoma se centraron en características como el control de crucero adaptativo y estacionamiento automático, pero con el tiempo se han logrado avances que llevaron a desarrollar la conducción autónoma de nivel 3, 4 y 5.
La conducción autónoma de nivel 3 permite que el vehículo tome el control total en ciertas situaciones, pero requiere que el conductor esté listo para intervenir en caso de necesidad.
El nivel 4 es un sistema capaz de operar en forma autónoma en la mayoría de las condiciones, pero puede requerir intervención humana en situaciones puntuales.
Por último, la conducción autónoma de nivel 5, refiere a la capacidad del vehículo para operar de forma completamente autónoma en cualquier condición, sin intervención humana absoluta.
Los vehículos autónomos vienen siendo explorados desde hace mucho tiempo por las principales empresas del mundo, que han estado invirtiendo millones de dólares.
Los grandes fabricantes tienen activos proyectos de conducción autónoma de distintos niveles, como el sistema Drive Pilot de Mercedes Benz, el Autopilot de Tesla, BlueCruise de Ford, etc.
Waymo, filial de Alphabet (matriz de Google), desde el 2020 ofrece al público viajes sin conductor en Phoenix, Arizona, en caminos bien señalizados.
Volvo y Uber trabajan en conjunto desde el 2016 en un vehículo completamente autónomo: el Volvo XC90. Este auto con equipamiento de asistencia y seguridad sirve como base para instalar el sistema de conducción autónoma de Uber.
Otro avance que se espera para un futuro cercano es la incorporación de esta tecnología a camiones y el uso en carreteras. Volvo ya está trabajando en conjunto con Nvidia, desarrollando una plataforma de inteligencia artificial para lograrlo.
Aunque aún quedan muchas pruebas por superar, se espera que esta tecnología continúe avanzando rápidamente en los próximos años.
Nuevos materiales y diseños en la fabricación de automóviles
Este 2023 la industria promete nuevos diseños y funcionalidades, brindando a los consumidores experiencias más atractivas y prácticas.
Uno de los avances más emocionantes es la adopción de nuevos materiales como la fibra de carbono y los polímeros reforzados con fibra de vidrio, que ofrecen una combinación única de resistencia y ligereza. Esto se traduce en vehículos más eficientes en términos de combustible y energía eléctrica.
Además, la adopción de nuevos materiales permiten mayor flexibilidad en el diseño, por lo que se espera ver autos con líneas más elegantes y aerodinámicas que darán un aspecto más moderno y sofisticado.
A su vez, la implementación de la impresión 3D permite la creación de elementos complejos de forma más rápida y facilita la personalización de los vehículos, permitiendo a los consumidores adaptarlos a sus gustos y preferencias.
En términos de funcionalidad, la conectividad este año juega un papel importante. Los vehículos están más conectados que nunca ya que cuentan con una integración perfecta con dispositivos móviles.
Tesla es un ejemplo de las tendencias actuales. La compañía ha cambiado el diseño y fabricación de los coches haciendo más eficientes los procesos de producción. Los grandes componentes del chasis de aluminio de una sola pieza y los paquetes de baterías estructurales han eliminado cientos de piezas redundantes.
Por otro lado, BMW asegura utilizar actualmente alrededor del 30 % de materiales reciclados por vehículo y su objetivo es llegar al 50 %.
A medida que las empresas siguen implementando nuevas tecnologías y los consumidores se adaptan a ellas, es probable que veamos más desarrollos emocionantes en el futuro.
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