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Gracias a las máquinas metalúrgicas es posible la fabricación y transformación de metales, con los que a su vez se generan otros productos indispensables para múltiples industrias. En este artículo te explicamos qué son las máquinas metalúrgicas, cómo funcionan y qué beneficios aportan.
¿Qué son las máquinas metalúrgicas y para qué se utilizan?
Las máquinas metalúrgicas son equipos diseñados para la manipulación, transformación y conformación de metales.
Se emplean en una amplia variedad de aplicaciones, desde la extracción de minerales hasta la creación de productos para el uso en distintas industrias como la automotriz, construcción, naval, electrónica, alimentaria, entre otras.
Tipos de máquinas metalúrgicas
Existen distintos tipos de máquinas metalúrgicas especializadas, cada una destinada a tareas específicas en el proceso de producción.
Veamos algunas de ellas:
- Prensas hidráulicas: estas máquinas permiten moldear los metales para obtener distintas formas. Se utilizan en el conformado de láminas metálicas y en la fabricación de componentes de alta precisión. Funcionan con una unidad hidráulica cuya baja presión inicial va aumentando por efecto de la presión de fluidos, dando como resultado una mayor presión de salida a través de un pistón.
- Hornos industriales: los hornos metalúrgicos son cruciales para procesos como la fundición y el recocido. Estas máquinas producen el calor necesario para la fusión de metales, el paso previo a su modelado y conformación.
Entre las variantes destacadas se encuentran los hornos de resistencia, que pueden alcanzar temperaturas de hasta 1200°, y los hornos por convección, que tienen un sistema de recirculación forzada de aire caliente mediante ventiladores, diseñados para utilizar en procesos de hasta 4000° de temperatura.
- Laminadoras: se encargan de reducir el espesor de los metales mediante rodillos de compresión y son esenciales en la producción de láminas metálicas y perfiles de sección constante.
Estas máquinas obran por acción circular continua, pasando el cuerpo de metal entre dos cilindros. Cuando ambos cilindros son lisos, el metal se estira con precisión sobre las planchas. En cambio, si son acanalados, se producen cilindros cuya sección se corresponde con el perfil de las acanaladuras.
- Máquinas de forjado: dan forma al metal utilizando fuerzas de compresión administradas por un martillo mecánico o una matriz. El proceso de forjado puede ser en frío, templado o caliente. Estas máquinas se utilizan para producir componentes como ejes y engranajes.
¿Cómo funcionan las máquinas metalúrgicas?
Las máquinas metalúrgicas llevan a cabo distintos procesos aprovechando las propiedades físicas y químicas de los metales para crear productos metálicos de diversa índole.
Proceso de fundición en las máquinas metalúrgicas
La fundición, que existe hace más de 6000 años, constituye uno de los procesos más antiguos en la transformación de metales. Este procedimiento calienta el metal hasta alcanzar su punto de fusión, momento en el cual se vierte en moldes con formas específicas.
Una vez que el metal se enfría y solidifica, se retira del molde y se obtiene una pieza con la forma deseada, que puede ser acabada con procesos de rectificado, pulido y esmaltado.
La fundición permite producir figuras complejas con metales u otros materiales (como epoxi, yeso o arcilla) que de otro modo serían demasiado complicadas o costosas de realizar.
Proceso de laminación en las máquinas metalúrgicas
En el proceso de laminación el metal se pasa a través de rodillos que ejercen presión sobre él, reduciendo su espesor y mejorando sus propiedades mecánicas.
Este proceso se utiliza para crear láminas metálicas que se usan en la fabricación de envases, carrocerías de automóviles y otros.
Este trabajo precisa de una gran inversión de dinero debido a que se emplean molinos especiales para lograr una correcta y gran cantidad de producción del producto en cuestión.
Proceso de forjado en las máquinas metalúrgicas
El proceso de forjado consiste en la aplicación controlada de presión y calor para cambiar la forma y estructura interna de los metales.
Se utiliza para crear piezas resistentes y duraderas, como engranajes, ejes y herramientas.
El forjado puede realizarse en frío o en caliente, según la aplicación que se desee dar al metal. También se puede realizar a través de forma continua (con prensas) o intermitente (con martillo).
¿Cuáles son los beneficios de utilizar máquinas metalúrgicas?
Utilizar máquinas metalúrgicas trae una serie de importantes ventajas que pueden impactar en la eficiencia de la producción y en la calidad del producto final.
Aumento de la productividad en la industria
La automatización y precisión que ofrecen las máquinas metalúrgicas permiten potenciar notablemente la velocidad de producción, fundamental para satisfacer las demandas de los consumidores en tiempos más acotados y por ende, mantener una posición competitiva de la empresa en el mercado.
Además estas máquinas cuentan con sistemas de control programables y configurables, lo que posibilita cambiar rápidamente de un producto a otro sin necesidad de hacer ajustes manuales en el medio, ahorrando tiempo valioso de producción. Esto permite producir más variedad de productos con una misma máquina.
Reducción de costos en la producción de metales
Otra de las grandes ventajas de utilizar máquinas metalúrgicas es que permiten disminuir significativamente los costos de producción.
Usar máquinas eficientes disminuye la necesidad de mano de obra intensiva y minimiza los desperdicios, lo que se traduce en una reducción de costos operativos y una gestión más eficiente de los recursos, que a largo plazo termina por disminuir los costos totales.
Esto permite también impulsar la competitividad de la empresa, posibilitando ofrecer precios más bajos en el mercado.
A su vez, las máquinas tienen la capacidad de funcionar de manera ininterrumpida durante periodos prolongados sin necesidad de pausas, lo que aumenta la capacidad total de producción y contribuye a la disminución de costos fijos y por unidad.
Mejora en la calidad de los productos metálicos
El trabajo con máquinas metalúrgicas hace posible el control de los procesos de fabricación de metales y la garantía de uniformidad y consistencia en la producción.
Estas máquinas fueron diseñadas para ejecutar operaciones con alta precisión, asegurando que cada pieza producida cumpla con las especificaciones exactas, reduciendo la variabilidad en las características dimensionales y funcionales de los productos. Como consecuencia, se obtienen productos de mayor calidad y confiables y la satisfacción de los clientes al cumplir con sus expectativas en términos de durabilidad, rendimiento y apariencia.
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