Resumen Ejecutivo
Santo Domingo se encuentra ubicado a 120 km al este de la ciudad de San Juan, Argentina a una altitud promedio de 1.200 metros al nivel del mar. El proyecto está accesible todo el año por medio de caminos pavimentados o de piedra, luego de tres horas de manejo de la ciudad de San Juan. Gran grupo de terrenos Santo Domingo comprende 250 km² de terrenos para exploración y explotación en Sierra de la Huerta, en la parte este de la Provincia de San Juan , Argentina. La Provincia de San Juan es la jurisdicción más atractiva de Argentina en minería, debido a que cuenta con políticas pro-minería e infraestructura en rápido desarrollo. La provincia es huésped de grandes operaciones mineras de clase mundial, entre las que es incluyen Veladero, Gualcamayo y Casposo, como así también varios proyectos en estado avanzado de desarrollo, como Pascua-Lama, El Pachon y Los Azules. Ubicado en las cercanías de la línea eléctrica establecida de 33 KW y la vía en Belgrano, parcialmente en desuso, a 25 km al sur del área del proyecto, que podría ser renovada para el transporte de metales a los puertos de aguas profundas de Rosario, Argentina. Situado dentro de un distrito histórico a pequeña escala, sin exploración moderna previa, Santo Domingo se está convirtiendo en un gran sistema combinado de mineralización con potencial de exploración en la región de baja altura. Exploración multi-propósito de objetivos Santo Domingo tiene potencial para oro, plata, molibdeno, plomo y zinc. El potencial para galio y otros elementos de Tierras Raras debe aún ser confirmado. El estandar inicial del test de roll de botella (24 horas de lixivado con cianuro) en 5 muestras de El Arriero Oeste en estructuras de Au-Ag indicaron recuperaciones significativas de Au-Ag, con un mínimo de 71 % de oro y presencia, por supuesto, de oro en algunas de las muestras.
El entorno mineralizado de Santo Domingo se ha probado extenso, con varios estilos distintos de mineralización y estructuras, todos correspondientes a distintos niveles y a las proximidades de un entorno pórfido. Los principales objetivos probados son: Au-Cu de estilo pórfido, de alto tonelaje, y grado bajo. Módulo de elasticidad transversal de Au-Ag polimetálico de tonelaje medio y de grado medio a alto. Clara estrategia de desarrollo Siguiendo la significativa inversión realizada en el mapeo. geofísica y geoquímica para avanzar en los proyectos para un estatus listo para la realización de perforaciones, la firma se encuentra buscando un socio con capacidad técnica y económica para explorar y desarrollar cualquiera de los dos o los dos estilos de mineralización, para cumplimentar el entendimiento del proyecto que tiene la compañía.
Introducción
La compañía que controla el Proyecto Santo Domingo, ubicado en Sierra de La Huerta, San Juan, Argentina, a través de una opción de contrato de compra de la exploración. Las actividades de exploración llevadas a cabo desde diciembre de 2009 permite la diversificación de objetivos exploratorios en dos tipos principales:
- Pórfido Au-Cu (de alto tonelaje y bajo grado) y;
- Módulos de elasticidad transversal de estructuras polimetálicas de alto grado Au-Ag, de tonelaje medio y grado medio a alto.
El primer grupo incluye a los proyectos Divisoria, El Arriero, El Arriero Extensión, Alunita y El Bronce; mientras que un segundo grupo alberga a los proyectos de Yvette y El Arriero Este. Los pórfidos de Au-Cu de la Divisoria muestran una presencia mínima de un diámetro de 700 metros en el que dos formaciones rocosas con pulsos de pórfidos andesiticos y dacíticos seguidos por cunetas riolíticas hacen intrusión en el basamento metamórfico. La alteración hidrotermal cuenta con un patrón concéntrico de distribución que muestra un núcleo de magnetita, una alteración secundaria de biotita potásica que pasa por las afueras de alteraciones filicas y propilíticas. Las alteraciones potásicas muestran una intensidad variable de alteraciones argílicas intermedias superpuestas, caracterizadas por clorita luego de la biotita y hematita (martita) después de la magnetita. Mineralización de Au-Cu diseminada y mineralización polimetálica de estructura controlada (vetas y brechas) resaltada por el mapeo y muestras incluyen picos de:
- 4m @ 0.79 g/t Au, 0.01 % Cu and 4m @ 0.58g/t Au, 0.06% Cu (mineralización diseminada);
- 0.4m @ 1.18 g/t Au, 186 g/t Ag, 0.07% Cu y 0.1m@ 0.9 g/t Au, 0.2% Cu (B y D en estadío temprano de tumbe de mineral en masa);
- 0.8 m @ 7.4 g/t Au, 84 g/t Ag, 0.03 % Cu; 0.3m @ 36g/t Au, 144g/t Ag
- 0.11% Cu y 0.2m @ 5.6g/t Au, 219g/t Ag, 20,1 % Pb y 8,7% Zn (último estadío de brechas de Au-Ag y vetas polimetálicas de sulfuración intermedia.
Los valores más altos de Au-Cu con zonas de mineralización diseminada tienen lugar dentro de un área de 500 metros por 300 metros, que se elonga hacia el noreste, en su mayoría dentro de la zona de alteración fílica. B y D tumbe de vetas de mineral en masa, con concentraciones que van entre el 1 y el 5 % ubicadas en los núcleos potásicos. Las vetas y brechas en último estadío controladas en tendencias estructurales al noroeste y al noreste se encuentran ubicadas dentro de los pórfidos y en el perímetro de la zona de contacto con el basamento metamórfico.
Diez (10) km de estudios de tierra magnetométrica resaltan un magnetismo bajo bien correlacionado con la zona mineralizada principal, dentro de la zona fílica, ocupando un área de 500 metros por 300 metros, que se elonga al noreste. Siguiendo una potencial continuidad en esta zona a niveles más profundos, se completó un estudio IP de Polo-Dipolo (PDP IP, 100 metros de espaciado dipolo) combinadolo con un estudio telúrico de Audio Magneto (ATM, por sus siglas en inglés). El PDP IP resalta una significativa anomalía de cargabilidad con una extensión de 750 metros por 400 metros (que se elonga al noroeste) y se abre a 300 metros de profundidad, la máxima profundidad del estudio. La alta cargabilidad se encuentra relacionada con la mineraliización sulfúrica dentro de la zona fílica afectando entre las formaciones rocosas del pórfido dacítico como a la brecha en contacto.
El estudio AMT delínea una anomalía de baja densidad entre 600 y 750 metros de profundidad. La resistencia de AMT es los primeros 300 metros se encuentra bien correlacionada con la resistividad entregada por el PDPIP.
Las geofísicas muestran potencial de hallar extensiones profundas de mineralización de estilo pórfidos delineadas en superficie.